El vídeo se grabó en Japón, supuestamente el fantasma de la anciana que vivía ahí y era dueña de la casa regresó del más allá para dar un fugaz saludo.
El vídeo fue grabado con una cámara de seguridad en las que se toma una fotografía cada determinado número de segundos. En uno de los cuadros se aprecia una figura blanca con forma de mujer y en el siguiente cuadro lo que se parece a una cabeza asomándose. Seguramente se trata de partículas de polvo o lluvia que al estar muy cerca del lente toman otras formas.